Este mes de septiembre, junto con mi amiga Les, tenemos colgada en Atelier de Fotografía, nuestra exposición Molladuras, un proyecto que durante un año nos ha llevado a patearnos las calles en días de lluvia, para captar aquello que más nos llama la atención, que no es otra cosa que la luz, el color, el movimiento y la gente.

Uno de los procesos más complicados en el acto fotográfico es la edición de fotos, en el sentido de selección. Una vez que se inicia la toma de fotos o la recolección de las ya realizadas, comienza la fase de eliminación, hasta llegar a al número que se ha prefijado. Es un paso duro, que obliga a dejar de lado fotos que inicialmente considerábamos como válidas, pero que por circunstancias de acople, no encajan en la serie final.

Os dejo una muestra de algunas fotos que se quedaron por el camino.